Esto puede verse en el considerable avance de los métodos que se utilizan en las obras: por ejemplo, hoy es posible tener la previsualización de un edificio gracias al modelado en 3D y el software de render arquitectónico. Un elemento fundamental para adaptarse a este contexto es la generación de materiales innovadores, pues estos deben responder a las tendencias globales en campos como el diseño y el manejo de espacios, además de que deben evolucionar para cumplir con los estándares de sustentabilidad que cada vez son más importantes a nivel mundial.
Nuevos materiales
A continuación presentamos ejemplos de algunos materiales nuevos que prometen marcar tendencia en el campo de la construcción:
1. Concreto translúcido:
concebido orgullosamente en México en 2004, está hecho a base de un componente ligero, transparente, resistente y sustentable llamado “ilum”. A pesar de que puede llegar a tener dos metros de grosor, permite el paso de luz hasta en un 70%. Es 15 veces más resistente que el hormigón convencional y 30% más liviano.
2. Aerogel:
este material innovador, también conocido como “humo helado”, es un gel compuesto entre 90% y 98% de aire. Es un sólido poroso de baja densidad que tiene la cualidad de funcionar como aislante térmico. Es mil veces más denso que el vidrio y al tocarlo se siente como una espuma de polietileno.
3. Pintura para energía solar:
desarrollada en Inglaterra, se trata de una pintura que, al estar basada en sulfuro de calcio, es mucho más económica que el silicio presente en casi todos los paneles solares disponibles actualmente. Gracias a su potencial para convertir una azotea en panel solar al solo pintarla y a las implicaciones en cuanto a sustentabilidad energética que esto implica, esta pintura es un material innovador de construcción que podría estar marcando tendencia muy pronto.