Por Sergio Pastrana D’Abbadie

La relación entre México y España es profunda y centenaria. Más allá de los vínculos históricos, existe un entramado cultural y emocional que se manifiesta en muchos ámbitos de la vida cotidiana, entre ellos, la gastronomía. Desde hace décadas, la cocina española ha tenido un lugar especial en el panorama culinario mexicano: primero, como herencia familiar de comunidades migrantes; luego, como propuesta de alta cocina; hoy, como una oferta diversa que va desde las tabernas tradicionales hasta los espacios más contemporáneos.

Las cocinas de ambos países comparten una pasión por el producto, por la sobremesa, por los sabores intensos y por el ritual de compartir. No es casualidad que ingredientes como el aceite de oliva, los embutidos o las técnicas de cocción lenta hayan encontrado un hogar natural en México. En la Ciudad de México, esta conexión se traduce en una escena vibrante de restaurantes españoles que reinterpretan clásicos, honran recetas de abuela o mezclan con inteligencia lo ibérico y lo mexicano. Aquí una selección de tres lugares imperdibles para quienes buscan la chispa española sin salir de la capital. 

En 2020, un grupo de amigos amantes de la gastronomía española creó Bulla porque querían tener un trocito de España en la Ciudad de México. La nostalgia de la cocina de la abuela y de los bares de esquina de toda la vida está impregnada en el menú creado por el chef Pedro Martín, quien a lo clásico le aporta un toque de vanguardia. Bulla es bueno para picar, tapear y compartir con cañitas o un buen vino. En las entradas uno puede dejar ir la tarde, especialmente con las croquetas o la variedad de huevos rotos, pero también vale la pena probar unas albóndigas o alguno de sus arroces y si queda espacio un solomillo en cualquiera de sus salsas. Recomendable para ir con amigos y hacer “bulla”.

En este pequeño espacio de la Condesa hay, como su nombre lo dice, un ambiente de taberna tradicional que conjuga luces tenues, piso y paredes de madera y manteles blancos con un servicio de primera y cocina superior. Se nota la influencia del famoso restaurante Casa Lucio de Madrid, donde el chef Jean Claude Roches “Chanclas” trabajó, y de donde trajo la autenticidad de la cocina española. Entradas para compartir como las patatas bravas (mezcladas en la mesa), las croquetas o el chorizo a la sidra son imperdibles. Para el fuerte, el rabo de toro o el solomillo con cebolla caramelizada no solo son deliciosos sino generosos en la porción. La carta de vinos es amplia y el ambiente relajado. Ya sea en su salón o en su terraza, es recomendable para ir con amigos, para una comida o cena casual e incluso de negocios.

Con casi 20 años de existencia, este restaurante toma su nombre de Getaria, un pueblo costero en el País Vasco. Y sí, su oferta del mar es por demás interesante, aunque la carta es amplísima. De ambiente un poco sobrio, tiene una cocina especial y un servicio ejemplar. Entre semana se presta para comidas de negocios, pero los fines, especialmente el domingo de paella, rebosa de familias que van a gozar de empanadas y quesos, gulas con gambas, revuelto de bacalao, pesca del día a la vasca, solomillo en medallones al manchego y, por supuesto, de la paella, de vasta porción y perfectamente cocinada. La carta de vinos, en su mayoría españoles, es amplia, y, ya sea en familia o con amigos, invita a pasar un buen rato en la mesa.

Bulla

Avenida Mazatlán 20C, Condesa, Cuauhtémoc, 06140. Ciudad de México.

https://www.instagram.com/bullamx/

La Taberna del Chanclas

Aguascalientes 206, Hipódromo Condesa, Cuauhtémoc, 06100. Ciudad de México.

https://www.instagram.com/latabernadelchanclascondesa/?hl=en

Puerto Getaria

Dakota 159, Nápoles, Benito Juárez, 03810. Ciudad de México.

https://www.instagram.com/puertogetaria/