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Parte del Área Metropolitana de Guadalajara, Zapopan es el segundo municipio más poblado del estado de Jalisco y sede de algunos sitios icónicos de la Perla Tapatía, como la Basílica de Nuestra Señora de Zapopan. Además, aquí están surgiendo negocios locales con propuestas culinarias que se cuentan entre las más interesantes de Guadalajara. 

 

 

Enora

Av. Aurelio Ortega 515, Los Maestros, 45150, Zapopan, Jalisco.

 

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El distintivo de Enora es ofrecer platillos creativos y deliciosos, y un excelente café. Esta combinación no sorprende, ya que Daniel, Fabrizio y Riki, quienes lo crearon en 2022, son parte del equipo del famoso restaurante PalReal, un clásico de la colonia Americana de Guadalajara.

 

Convencidos de que querían probar suerte en otra zona de la ciudad, los socios comenzaron a buscar un local. Un buen día le llamó a Fabrizio un arquitecto para contarle que estaban por terminar el proyecto de una cafetería en la colonia Seattle, pero aún no tenían quién la operara. Las cosas se compaginaron y nació Enora.

 

Para crear el menú, el equipo de Enora recurrió a la asesoría del chef Fabián Delgado de PalReal. Riki, socio de Enora, relata así el proceso: “Fabián nos ayudó a hacer un proyecto en el nivel de comfort food, que se adapta muy bien a este espacio, y a nivel sensorial, a salirnos de la línea de PalReal y encontrar nuestra propia identidad. Fue un proceso creativo chido entre nuestras ideas, lo que él conceptualizaba y antojitos de los amigos o familiares. Logramos un menú muy bien desarrollado, que sigue siendo comida mexicana, sabores mexicanos, nomás que trae ese look and feel de una comida un poco más mediterránea, pero con ingredientes locales y sin dejar de tener la salsa martajada, la salsa macha”.

 

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Enora, además, es un restaurante con un enfoque hiperlocal y ecológicamente consciente. En el afán de generar sus propios insumos y ser congruentes con el perfil mediterráneo de su cocina, no tienen bolillos ni tortillas; en cambio, tienen su propia receta de focaccia. “La tortilla está solo en el chilaquil –dice Riki–. Yo la extraño, está en mi corazón, pero esa es la propuesta”. Debido al impacto ambiental e hídrico que provoca la siembra del aguacate en la zona de Jalisco y Michoacán, este no se encuentra en el menú; lo mismo pasa con las moras, cuya siembra afecta a la ribera de Chapala.

 

Tu experiencia en Enora no está completa sin un buen café, tostado por Café Estelar: “Tener una excelente relación con los productores permite que tengamos una materia prima de alta calidad que es tostada en Estelar tratando de que no hable la casa tostadora, sino el terruño, el parietal y el productor. No puedes hacer de un café malo una taza buena; pero sí puedes hacer de un café bueno, una mala taza de café. Nuestra chamba es transmitir la calidad de la materia prima y no echarla a perder”, concluye Riki.

 

 

Monster Ramen

Av. Aurelio Ortega 753, Los Maestros, 45150, Zapopan, Jalisco. 

 

Unas cuadras al este de Enora, encontrarás una opción perfecta si tienes antojo de sabores orientales con un toque local: Monster Ramen. Agustín, emprendedor de este restaurante y vecino de la Seattle desde hace dos décadas, nos cuenta: “Tomamos los principios tradicionales japoneses y los fusionamos con sabores e ingredientes mexicanos, incluso algunos más cercanos al paladar tapatío, por ejemplo, chicharrón crujiente o suadero. Además de las porciones de panceta de cerdo cocinada por un largo proceso artesanal, nuestras proteínas son marinadas y ahumadas lentamente, lo cual potencializa sus sabores. En nuestras recetas utilizamos diversos chiles, entre ellos el guajillo, que le dan un toque diferente a nuestros caldos”.

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La receta de fideos de Monster Ramen es producto de un largo tour por algunas ciudades de Estados Unidos para comparar sabor, densidad y resistencia de los fideos, así como de haber tomado un curso sobre noodles. “Así logramos crear lo que consideramos el mejor balance y equilibrio con el resto de nuestros ingredientes”, dice Agustín.

 

Ya que sus creadores son vecinos de la Seattle, Monster Ramen tiene una profunda vocación de apoyo a su comunidad: “Nacimos en mayo de 2020, en plena pandemia –relata Agustín–, así que nuestro propósito fue tratar de comprar la mayoría de nuestros insumos en comercios y mercados locales para activar un poco la economía. También contratamos principalmente a personas de las colonias cercanas para dar empleo a miembros de la comunidad y que nuestros colaboradores no tengan que desplazarse largas distancias”.

 

El proyecto de Monster Ramen creció en 2022, cuando abrieron Lukas Café en el local contiguo. Este lugar, que ofrece un café de especialidad de la región de Chiapas, así como productos artesanales creados por personas de la colonia y sus cercanías, como conservas, cervezas artesanales, pan, etc., complementa la propuesta de Monster Ramen con postres y desayunos.

 

 

Pollitos Kiki

Epigmenio Preciado 579, Los Maestros, 45150, Zapopan, Jalisco.

 

Un poco más al norte de la Seattle se encuentra un restaurante que en pocos años se ha convertido en un consentido de la zona: Pollitos Kiki, donde venden, claro, pollo, preparado al estilo Sinaloa.

 

Mateo, quien con una gran sonrisa se presenta como fundador de Pollitos Kiki, cuenta así la historia de su creación: “Pollitos Kiki fue inspirado primordialmente en la familia. Nacimos en pandemia. Yo tuve una catástrofe: choqué, el seguro no me quiso pagar y estaba en un momento malo de mi vida. Tuve que vender el carro destazado, por partes casi casi. Con ese dinero abrimos el restaurante. Kiki significa ‘doble felicidad’ en japonés”. Efectivamente, comer en Kiki es comer en familia: “Mi hermana es mi socia, mi mamá trabaja aquí y mi papá se sienta con los clientes. Hay quienes se sienten no sé si solos, tristes o agobiados, y aquí tienen un abrazo como de familia”, nos dice Mateo.

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El secreto de Pollitos Kiki es ofrecer un proteína saludable que no lleva adobo. “Por lo general, en otros lugares, el pollo lleva un adobo o extra de grasita –explica Mateo–. Nosotros no le echamos nada, se asa con la misma grasa del pollo y únicamente trae sal y pimienta. Las claves son la altura de la parrilla y la cocción: el carbón tiene que estar a una cierta brasa para que quede crunchy”.

 

A partir de esta base, en Kiki puedes encontrar opciones, en palabras de Mateo, para atascarte o cuidarte: “Lo que yo les decía a mis papás es que está bien difícil un lugar donde puedas comer sano o puedas munchear, que tengas las dos alternativas. Hicimos un híbrido: empezamos haciendo el pollo que es una proteína saludable, y posteriormente vamos echándole al munchies: más sólido, más grasosito, con opciones como el taco adobado o el lonche”.

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La verdad es que solo o en algún platillo, el pollo de Kiki te va a encantar. No sorprende que su nombre haya pasado de boca en boca rápidamente hasta ser un must de la Seattle. “No sabemos ni cómo fue. Arrancamos con 10 pollos y los vendimos ese mismo día. Ha sido muy noble el negocio con nosotros”, concluye Mateo.

 

 

Salón Candela

Javier Mina 183, Centro, 45100, Zapopan, Jalisco.

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Nuestra última parada es en el mero centro. A cinco minutos caminando de la Basílica de Nuestra Señora de Zapopan nos esperan tragos, comida y ritmos llenos de sabor en el clásico Salón Candela.

 

Este lugar lleva más de 20 años en Zapopan centro. En una primera etapa, se llamó Café Candela, pero desde 2019 cambió su nombre cuando Grupo Habanero, que además opera Habanero Negro y Turbio en la colonia Americana de Guadalajara, intervino su menú. A partir de entonces, la propuesta de Candela se enfocó en apoyar marcas de destilados locales, ofrecer una cocina casual que acompañe bien a los tragos y ser un foro para grupos musicales de la ciudad.

En el menú de bebidas del Salón Candela podrás encontrar destilados de productores pequeños que podrían llamarse emergentes, pero que en realidad son personas que llevan muchos años haciendo, por ejemplo, tequila, pero poniendo énfasis en el cuidado de sus procesos, en la trazabilidad del agave, etc. Uno de los tragos más icónicos del lugar es el Chejuino, que es el típico fermento jaliciense tejuino acompañado de limón, sal y cerveza.

 

En cuanto a la comida, el Salón Candela ofrece platos sencillos pensados para compartir y acompañar las cervezas, tequilas, mezcales y demás bebidas artesanales. La idea es tener un menú corto, pero cuidado y sabroso, que haga sencilla la elección. Así, entre las opciones de aguachiles, ceviches y tacos, destacan el taco de lechón meloso, el taco Lyn Mei (de pork belly y chicharrón), y los camarones roca. Cuentan, además, con opciones veganas.

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La cereza del pastel y motivo por el que el Salón Candela se mantiene lleno (es importante reservar para asegurar tu lugar) es su oferta musical: en distintos días de la semana, se alternan grupos que tocan jazz, salsa, cumbia y baladas norteñas, además de DJs locales. La música cobija al menú y los tragos para generar una experiencia cálida y muy divertida.

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Esta es solo una probada de los increíbles sabores que te esperan en Zapopan y que puedes disfrutar #ConAmex.

 

 

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